La Sirenita (1989)

Bajo el mar, bajo el mar. Nadie nos fríe ni nos cocina en la sartén. Si no te quieres alinear bajo el mar te quedarás. Y sin problemas entre burbujas. Tú vivirás Bajo el mar, bajo el mar.

Chalalalalala que paso, el no se atrevió y no la besará, chalalalalala que horror que lástima me da ya que la perderá.

¡Hasta aquí llegó el amor verdadero!
 

Una chica vino a rescatarme y estaba cantando, tenía la voz más hermosa. - Erick, creo que bebiste demasiada agua salada. Vámonos.

Solo nadar no es original, por qué no tener un par de piernas y salir a pasear, ¿cómo dicen?, a pie.

Verás que no logras nada conversando a menos que los quieras ahuyentar.
 

Un boquiche humerfluo curvilíneo.
 

Si tan sólo pudiera hacerle ver que no veo las cosas como el lo hace no es posible que un mundo que hace tantas maravillas sea tan malo.

La perdí una vez, no pienso volver a perderla.
 

¡Ariel, pobre alma en desgracia!
 

Ariel se convirtió en humano. Va a hacer que el príncipe se enamore de ella. El tiene que besarla. - Y sólo cuenta con tres días.

Si tu quieres ser feliz entonces tienes que pagar.
 

No sé que hacer, cuándo será, pero yo debo aquí regresar. Siento que si puedo formar parte de él.

Alguien va a tener que atarle a esa niña las aletas al piso.
 

Está prohibido todo contacto entre el reino de las sirenas y el humano. Ya lo sabes Ariel. Todo el mundo lo sabe. - Hubiera muerto. - Un humano menos de que preocuparse. - Ni siquiera lo conoces.

Admirada tu serás si callada siempre estás. Sujeta bien tu lengua y triunfarás.

Excelente, ahora comamos antes de que se escape el cangrejo de mi plato. ¿Eh?

El viento fuerte la mar tranquila, el Rey Tritón estará de muy buen humor. - ¿El Rey Tritón? - El soberano del reino de las sirenas, los verdaderos marineros saben quién es él.

Bien hecho muchachos. Estuvo cerca, demasiado. ¡Ay, pero es tan resbalosa! Es mejor de lo que creí.

Lo que quiero es tu voz. - ¿Mi voz? - ¿Qué comes que adivinas? No hablarás no cantarás. - Pero sin mi voz, ¿cómo? - Eso no importa. Te ves muy bien. No olvides que tan sólo tu belleza es más que suficiente.

¿Qué debo dar para vivir fuera del agua?, ¿qué hay que pagar para un día completo estar? Pienso que allá lo entenderán, puesto que no prohiben nada, ¿por qué habrían de impedirme ir a jugar?, a estudiar que hay por saber, con mis preguntas y sus respuestas, ¿qué es fuego? ¿qué es quemar?, lo podré ver.

Los hombres no te buscan si les hablas, no creo que los quieras aburrir. Allá arriba es preferido que las damas no conversen a no ser que no te quieras divertir.

¿Qué tengo aquí? Que lindo es, es un tesoro que descubrí, es muy simple decir que no hay más que pedir.

Los peces son muy felices, aquí tienen libertad. Los peces allí están tristes, sus casas son de cristal. La vida de nuestros peces muy larga no suele ser. Si al dueño le apetece, a mí me van a comer.

La magia de bruja yo comienzo a convocar.
 

Y poder ir a descubrir que siento al estar ante el sol, no tiene fin; quiero saber, más, mucho más.

Adolescentes, se creen que lo saben todo. Les das las tenazas y se aprovechan de ti.

Cuando me iré, quiero explorar, sin importarme cuando volver, el exterior, quiero formar, parte de él.

Te voy a contar una historia de mar que te va a servir de vedad, si una sirena escuchas cantar te podrá un hechizo especial.

Quiero que sepas que bien estarás. Quisiera poder quedarme a tu lado. Me gustaría tanto verte feliz. Y disfrutar bajo el sol. Tu compañía sin condición. Yo volveré, ya lo verás, por ti vendré. No sé qué hacer, cuándo será. Pero yo debo aquí regresar. Siento que sí, puedo formar parte de él.

Yo quiero ver algo especial, yo quiero ver una bella danza, y caminar con los, ¿cómo se llaman?, ah, pies.

Adiós príncipe azul.
 

Bien. Es hora de que Úrsula meta sus tentáculos en el asunto.
 

Los hijos deben tener libertad para hacer su propia vida.
 

Jamás había visto un humano tan de cerca. ¡Qué atractivo! ¿Verdad? - A mi me parece algo peludo y desaliñado. - No, no el. El joven que está tocando el boquiche.

¡Wow! Esto es algo especial fuera de lo común. - ¿Qué es? - Es un cachivache que los humanos usan para acomodarse el cabello. Un giro por aquí, un giro por allá y listo te queda una configuración del cabello que todos los humanos admirarán.

Bajo el mar, bajo el mar. Vives contenta, siendo sirena eres feliz.
 

¿A no? No necesito conocerlo, todos son iguales. Sin espinas, arponeros, y comen pescado, no tiene sentimiento alguno. - ¡Es que yo lo amo! - ¡No! Has perdido la cordura. Él es humano, tu una sirena. - No importa.

Ariel escúchame, ese mundo está muy mal. La vida bajo el mar es mucho mejor que el mundo allá arriba.

Ariel por favor, bájate de las nubes y pon tus aletas en el agua.
 

Aquí abajo está tu hogar.
 

Déjame poner bien los pies sobre la tierra a ver si adivino que es lo que tienes de nuevo. - ¡Tiene piernas cegatón! Le dio su voz a la bruja a cambio de piernas ¡Cabeza hueca! - Ya lo sabía.