Nadie puede creerse que la chica de la floristeria, sin conocerlo de nada, decida montar en la camioneta, y mas tarde entrar en su casa; cuando podia haber llamado a un taxi desde la tienda tras perder el autobús. Para mí, esto es un error de guión-situación.
Lowell Freeman
Nadie puede creerse que la chica de la floristeria, sin conocerlo de nada, decida montar en la camioneta, y mas tarde entrar en su casa; cuando podia haber llamado a un taxi desde la tienda tras perder el autobús. Para mí, esto es un error de guión-situación.
Reportar